Mira eso púdrese:
no fíes del  tiempo.
En el niño  permanece
y no temas vivir poco.
Del consumo habla.
 Confiesa tus errores.
La enfermedad relata
y escenifica tu angustia.
Miente acerca de tus logros.
Teme a tus próximos
y ama a distancia.
Deja a tus padres en el ayer
que se petrifican de ser mudos.
No intentes ser claro con ellos.
Con tu patron no discutas
ni le hables de tus deseos
imagínale un pasado límpio.
Quiere a tu mujer
si te permite morar en ella.
Si tienes suerte ten un hijo
que a su vez sea vida y calavera.
No creas en el destino.
En la larga vejez
la muerte pide.
En este medio consumista vales menos que un perro
y que una selfie.
Mora en la soledad del silencio:
impotente no pudiste cambiar el mundo.
Pagarás tu cobardía y tus quijotadas
que son toda tu sabiduría.