domingo, 12 de mayo de 2019

Al límite

Aún llegan hasta aquí
de la desértica urbe
desde su larga marcha
los folículos primaverales.
Aún llegan a verdear
los rudos pinos silvestres
en los límites de las nieves.
La enredadera reptando
como herido en campo minado.
Los líquenes como místicos
en las grietas de los hormigones.
Esos musgos y hongos
demas monocelulares
que sobreviven en los sótanos
y no rinden sus armas.
I

voy a ver como verso esto:
ando en mi vida
por la pasion 
o la mente
en la pepa
del bien 
y del mal
asi me quiebre
en mil pedazos
en fin llegas desnudo
o sea al nihil

II

si no vives
no escribes
cada cosa vive 
a su modo
mientras vive
es decir su timbre propio

III

no sera el silencio un mito?

he blindado mi cuarto
para no oir la fatal urbe
pero no logro asordinarla
para hundirme en el silencio
de la noche o del aire puro
sin ecos ni gritos
salvo el silencio dócil
del latir de mi cordial
la sonora quietud
de san juan de la cruz
la onda rebelde del viento
y sus remolinos sigilosos
entre el algodon
y las tapias mudas
que guardan mi casa.
no será el silencio un mito
o una utopia?

 Hayku Cuanta tristeza en un arbol sin hojas en el otoño 2 la mariposa amarilla gusta del jóven Casco de vaca. 3 El sol, la luna la tierra p...