Yo te llamo amor a tu puerta
que condenada quedó al irme
yo te llamo sobre la reja sellada
con candados de silencio soldada.

Ya tu voz se cerró para siempre
ya no hay quien otee con su mano
aquel adios o la bienvenida
aquel amor como flores en manojo.

Ya esa ventana es brusca
de vidrios dolorosos punzantes
ventanas herméticas férreas
en sueños de hierro y piedra.

Ya ahí ninguna casa se asoma
ninguna luz que mi alma calme
ningun cuerpo de recuerdo sano
que con tono mi nombre exclame

Qué extraño ese sardinel
entre celdas de cemento
entre el humo de los autos
algo tan delicado y terco
tan bonito jardincillo
donde mi mano en cuenco
ha tomado una hojilla
como niña asustadiza
a la que en bajo le digo
tan linda tu carita.

Tal vez escribiría

este es un momento triste

Tal vez me gustaría

a mi mismo

envuelto en tí.

Lectura de poesía

Sordo de cerca
sólo verá
en el cuadro de la ventana iluminada
a solo un par de monigotes bailando
sin la música que los anima.

oH¡ Verano tenue
que mi corazón renuevas
trae mi primer amor
trae aquellas avecillas
a este lugar de la vida
donde descanso y vivo..